Los cables submarinos recorren bajo el agua miles de kilómetros a lo largo del planeta y su importancia es vital para garantizar la conectividad global. Muchas de estas “carreteras” del mar están cada vez más saturadas y muchos cables están llegando al final de su vida útil, por lo que contar con vías alternativas se vuelve fundamental.

Y no solo esto, además, la infraestructura de cables submarinos ya no únicamente es dominio de operadores de telecomunicaciones. Ahora nuevos jugadores están invirtiendo en cables de fibra óptica en otras regiones para asegurar calidad y baja latencia en la entrega de sus contenidos.

En este panel, los diferentes expertos de la industria analizan cómo se están diversificando las nuevas rutas y el papel que cumplen los diferentes actores que conforman el mercado y en particular las principales transformaciones que vienen de la mano de los cables de los hiperescala y los operadores privados que están de vanguardia."