Vivimos en una época en que la tecnología se encuentra presente en cada ámbito de nuestras vidas. Desde la compra del supermercado que va directamente a la puerta de nuestra casa, hasta la domótica con Inteligencia Artificial que hace que nuestros hogares, edificios e instalaciones sean completamente automatizados, aportando servicios de monitoreo en tiempo real, seguridad y gestión completa de la instalación.

En esta nueva normalidad, conviviendo con la pandemia que nos afecta, estas tecnologías en conjunto con las plataformas de trabajo colaborativo y videoconferencias (Teams, Zoom, Meet, etc) han pasado a ser fundamentales y han tomado un lugar importante en nuestras vidas para el desarrollo y continuidad de nuestro trabajo, sobre todo, para mantener la confiabilidad máxima y óptima operación en los centros de datos.

Por otra parte, tenemos la formación y especialización, que de la mano de Internet y de la tecnología, también están propiciando nuevas experiencias vinculadas con el trabajo en la era del coronavirus, como la formación online, el auge de las plataformas de e-learning, o la celebración de webinars, conferencias web y masterclass online.

La inteligencia artificial ha tenido un gran impacto en todas las aristas de la tecnología: desde equipos TI que mejoran su eficiencia y rendimiento en base a sus procesadores inteligentes o plataformas de monitoreo capaces de tomar decisiones autónomas en base a los datos recopilados, etc.

Sin embargo, como toda tecnología relativamente nueva, se debe implementar con cautela en los centros de datos para tener un historial sobre su confiabilidad y seguridad en el uso de instalaciones de misión crítica. Un ejemplo de esto son las baterías de ION Litio, altamente eficientes en el almacenaje de energía y en ciclos de descargas, pero que aún no se masifica su uso por la falta de información sobre el comportamiento a largo plazo en centros de datos.

Todos estos avances que hemos vivido durante los últimos meses han supuesto una serie de riesgos operativos para los Data Centers; y hemos observado que uno de los grandes desafíos tecnológicos a afrontar en la nueva normalidad será contar con infraestructura diseñada y preparada para operar continuamente y que pueda ser administrada y monitoreada remotamente, a pesar de encontrarse aislados o sin posibilidad de apoyo exterior, es decir, equipos y recursos en sitio, así como combustibles, herramientas y refracciones.

Sin embargo, aun con todos los avances, la base de la operación sigue siendo el ser humano, tanto para la operación de los equipos de IT como el servicio y mantenimiento a los equipos de infraestructura electromecánica que soportan la operación continua de los procesos del Data Center.

Este tema dio mucho de qué hablar el pasado día 23 de febrero durante la celebración del “Panel: IA, Automatización y Monitoreo Remoto: ¿Cuáles tecnologías nuevas y actuales pasan a ser fundamentales en esta nueva normalidad?” donde Martín Ramírez, Líder de Continuidad Operacional Data Center de IFX Networks; Arturo Maqueo Bobadilla, Director de Desarrollo de Negocios para México y Centroamérica de Uptime Institute; Héctor Sánchez Madera, Senior Manager Facility Operations de Equinix; y Alberto Alves, Director of Operations de Scala Data Centers, hablaron sobre este tema clave para el futuro de la operación de centros de datos en la nueva normalidad.

Si se perdió este evento, puede verlo en diferido en on-demand: DCD>MANAGEMENT & OPERATIONS.