La nube está detrás de muchos aspectos de la vida cotidiana que la nueva normalidad ha traído a nuestras vidas, no solo a consecuencia de la pandemia de la Covid-19, sino porque las empresas, instituciones y usuarios ya veníamos demandando desde hace varios años un servicio de alojamiento seguro más allá de nuestros propios dispositivos. Además, cada vez son más las tecnologías que están migrando sus servicios de IT hacia la nube en estos últimos años.

Estamos en una época en la que no solo las personas demandamos herramientas para nuestro día a día para comunicarnos unos con otros, para socializar de forma online, para ver películas y series bajo demanda, jugar online o trabajar desde cualquier lugar del mundo desde el que dispongamos de un punto de acceso a Internet; sino también que la industria está adaptando sus procesos TI para ser más eficientes y seguros gracias a la digitalización de sus procesos. Y ha sido el Cloud el encargado principal de “sortear”, al menos en cierta medida, la mayor parte de los problemas provocados por la pandemia durante los años 2020 y 2021 gracias a que ya llevábamos años creando un gemelo digital de todos los procesos y, por supuesto, tener acceso a la innovación y una disponibilidad inmediata a los recursos, sin olvidarnos de la flexibilidad de acceso a los datos que permiten a las personas trabajar desde la oficina, pero también desde su propio domicilio.

El Cloud, el gran olvidado de la economía digital, es el medio a través del cual podemos reunirnos mediante videoconferencias, nos comunicamos mediante mensajes de forma segura, trabajamos… y para que el Cloud funcione necesitamos contar con infraestructuras como redes de fibra o inalámbricas, con los terminales para la conexión (ordenadores, dispositivos móviles…), convergiendo finalmente en los Data Centers. Teniendo esto en cuenta, según lo vivido hasta la fecha y siguiendo la estela de las tendencias durante los últimos meses, se espera que a final de 2021 el 40% del PIB de Europa ya proceda de la economía digital, por lo que es esencial que nos preparemos para abordar las necesidades que irán surgiendo en este nuevo entorno.

El Cloud en España

En España, según el informe “Soluciones Multicloud para la Transformación Digital” realizado por IDC Research España en colaboración con Oracle, se espera que el mercado de cloud crezca durante el mismo periodo en torno al 20% y recoge, además, que para el próximo año el 40% del gasto principal de TI de las empresas de nuestro país estará relacionado con la nube, cifra que se espera alcance el 80% en 2028.

Esto requiere que se desarrollen nuevas habilidades profesionales o personal cualificado para la operación y mantenimiento de las infraestructuras y en este sentido España tiene un posicionamiento competitivo muy interesante capaz de dejar a un lado los mercados FLAP, convirtiendo a nuestra región en el nuevo Hub digital del sur de Europa a nivel de infraestructura y de Cloud.

Por otro lado, otro informe elaborado por la consultora Quint titulado “Cloud Computing en España 2020” indica que se espera una ralentización del fuerte crecimiento experimentando en los últimos años debido al impacto económico provocado por la crisis de la Covid-19. No obstante, el informe señala que “la pandemia ha actuado también como un acelerador de la adopción de la nube a nivel operacional, en cuanto a la continuidad del negocio y resiliencia, mejorando el nivel de agilidad de los equipos y reorientando la innovación”.

La infraestructura Cloud está demandando también un desarrollo y una aproximación no solo a nivel de España, sino a nivel europeo para hacer frente a los servicios Cloud que permitan a nuestro país mantener su posición donde empresas americanas están actualmente imponiendo su posición. Según el diario Cinco Días, la Asociación Española de la Economía Digital (Adigital) está urgiendo al Gobierno de España una estrategia ‘cloud’ nacional para impulsar la economía del dato, lo que supone promover esta tecnología a costes accesibles y por consumo, crear un grupo de expertos para desarrollar una propuesta de estrategia en la nube para España y eliminar todas las barreras regulatorias.

“Las tecnologías y servicios de computación en la nube son esenciales para cumplir con los retos más acuciantes de nuestra transformación digital al facilitar a todas las empresas y administraciones públicas, con independencia de su tamaño, el acceso a las últimas tecnologías y a precios muy bajos, pagando solo por lo que se consume”, indicaba Carina Szplika, quien era presidenta Adigital (hasta hace pocos días cuando Cesar Tello ha ocupado la silla de la presidencia de la Asociación) y ha subrayó que "la nube es la base de la economía del mañana, la economía del dato. Sin ella, no es posible desarrollar tecnologías clave como el big data, la inteligencia artificial o el internet de las cosas”.

La asociación también propone la creación de un grupo de expertos para desarrollar una propuesta de estrategia cloud para España y las administraciones públicas, en el contexto de España Digital 2025; impulsar y promover la colaboración público-privada para la capacitación y formación digital de los profesionales en las administraciones públicas y el sector privado y la atracción de talento digital y acelerar la migración al cloud de las pymes, apoyándose en los programas de Red.es y el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital.

Para Szplika es el momento de hacer esta apuesta “porque contamos con el apoyo de los poderes públicos” como muestran el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia España Puede y el Plan España Digital 2025, “que son una oportunidad inmejorable para lograrlo e impulsar el tamaño de la economía digital española”. La presidenta de Adigital resaltó cómo el primero de estos planes reconoce los sistemas en la nube como un área clave y cómo el segundo va más allá y anuncia por primera vez una estrategia cloud para la administración general del Estado.

Integradores Cloud en España

La consultora Penteo, publicó recientemente la edición 2020 del Universo Penteo de integradores Cloud, en el que atendiendo a las capacidades, prestaciones, proyección y calidad percibidas de acuerdo a 9 factores formados por 33 indicadores y más de 125 preguntas ha establecido cuáles son los 8 integradores Cloud mejor posicionados en el Universo Penteo: Accenture, Atos, Fujitsu, IBM, Linke, Nexica Econocom, T-Systems y Telefónica.

Sin embargo, son muchas las empresas españolas, que tienen aún mucho que decir en cuanto al Cloud en nuestro país y que ya se están encargando de ocupar las posiciones referentes que se merecen y que tanto valor tienen que ofrecer al mercado nacional.

¿Cómo se está preparando España para la creciente demanda de servicios en la nube?

La Covid-19 ha provocado el surgimiento de nuevas necesidades y nuevos servicios al que el Cloud ha podido y sabido dar respuesta. La transformación digital y la adquisición de nueva infraestructura híbrida han sufrido una potentísima aceleración durante los últimos meses. Esto ha sido “forzado” por la situación de pandemia y, en efecto, la necesidad de enviar a los empleados a trabajar desde casa, algo que hace unos pocos años habría sido impensable para la mayoría de las empresas.

Empresas tecnológicas como Intel, Data4, Equinix, Vertiv, NetApp, Sodexo, etc. por mencionar solo a unas pocas y cuya presencia en nuestro país es esencial, están trabajando tanto con los clientes finales, como con los principales Cloud Services Providers, creando y modernizando en nuestra región sus infraestructuras y tecnologías para proporcionar todas las tecnologías que puedan procesar toda la información y todos los datos, almacenar esa ingente cantidad e información de una manera eficiente y en poder mover esos datos de una forma rápida gracias a la conectividad.

Hay que tener en cuenta que el modelo Cloud híbrida permite el acceso rápido y la flexibilidad a muchas soluciones diferentes que se deben abordar de maneras totalmente distintas. Para ello, debe tenerse en consideración cuál es el objetivo que se quiere alcanzar mediante la adopción de la nube:

• Cubrir necesidades de alojamiento de infraestructuras tecnológicas internas como las necesarias para dotar a los empleados del teletrabajo
• Desarrollo de nuevos servicios para cubrir nuevas necesidades y precisan de un nuevo cambio hacia la digitalización, como por ejemplo podría ser el caso de los restaurantes para incorporar los envíos a domicilio

Aun con todo esto hay que tener en cuenta principalmente la capacidad de la propia compañía, ya que se debe tener en cuenta que el cloud no es otra cosa sino un nuevo habilitador tecnológico, y si no se está preparado como compañía, el Cloud no servirá para cumplir estos nuevos retos a abordar.

Por otro lado, una mala elección de servicios cloud puede acarrear unos costes muy elevados, por lo cual se debe tener en cuenta qué opciones ofrecen los servicios de la nube y cuáles son los objetivos que se quieren alcanzar para evitar un sobrecoste de la factura de la nube.

Habrá que ser pacientes y seguir ayudando a las empresas españolas para que gracias a la infraestructura cloud de nuestro país puedan alcanzar sus nuevos objetivos y obligaciones digitales. Desde DatacenterDynamics estaremos atentos a esta evolución y aquí seguiremos por mucho tiempo para acompañarles en todos los procesos de crecimiento, innovación y aprendizaje relacionado con las tecnologías Cloud.