Considerado el mayor programa de generación de energía distribuida del país entre empresas privadas, según la Agencia Nacional de Energía Eléctrica (Aneel), "Energia da Claro" acaba de recibir una nueva instalación: la usina solar Tanabi, ubicada en la ciudad homónima del interior de São Paulo y entregado por el socio RZK Energia.

Tanabi tiene una capacidad instalada de 6,3 MegaWatts de potencia y es la mayor planta en términos de potencia instalada en la asociación entre el operador y el proveedor, que incluye cuatro fuentes solares fotovoltaicas más (dos en el Distrito Federal y dos en el interior de São Paulo), dos a biogás (en las regiones metropolitanas de Río de Janeiro y São Paulo) y una hidroeléctrica (en Mato Grosso). En conjunto, las plantas suman una capacidad instalada para la generación de 36 MW de energía a partir de fuentes 100% renovables.

Implementado en 2017, el programa 'Energia da Claro' abastece las operaciones de la compañía en Brasil a través de alianzas para la construcción de plantas de generación distribuida y la compra de energía limpia en el mercado libre, en contratos de largo plazo en el modelo PPA (Power Purchase Agreement). Además de la adopción de medidas para incrementar la eficiencia energética de la compañía.

El programa generará el equivalente al 80% de la energía consumida en todas las operaciones e instalaciones de la empresa de telecomunicaciones en Brasil, a través de diversas fuentes renovables, como solar, eólica, hidroeléctrica, biogás. Actualmente, las 70 plantas que contempla la iniciativa abastecen a más de 20 mil unidades consumidoras y atienden más del 60% de las antenas de Claro con energía renovable.

“Claro apuesta por reducir la emisión de contaminantes a la atmósfera y apuesta por ser prácticamente autosuficiente en energía procedente de fuentes limpias. Nuestro programa es pionero y es hoy el mayor proyecto de autoconsumo a distancia de Brasil, siendo una referencia en este tipo de generación de energía Gran parte del éxito alcanzado por "Energia da Claro" se debe a la relación de confianza que construimos con socios como RZK, que ha estado a nuestro lado desde el principio", destaca Hamilton Silva, director de Infraestructura de Claro.

La planta solar de Tanabi evitará la emisión de más de mil toneladas de CO2 al año y será operada en el formato de Generación Distribuida (GD). En este modelo, la producción de energía se realiza cerca del centro de consumo, lo que reduce costes y evita pérdidas técnicas en los procesos de distribución y transmisión, abaratando la factura final, además de contribuir al desarrollo sostenible.

Según João Neves, director general de RZK Energia, la inversión privada en fuentes de energía limpia es una tendencia que cobra fuerza en Brasil, contribuyendo no solo a la adopción de una matriz renovable y ecológicamente correcta, sino también a la creación de empleos y generación de energía para diferentes familias.

“Quienes adoptan el modelo GD, además de ganar en eficiencia energética y reducir sus costos, también están tomando el control de sus decisiones en la compra de energía, contribuyendo a la conservación del medio ambiente y al avance del acceso al libre mercado de todo”, dice Neves. “Creemos que el cliente debe estar siempre en la base de las estrategias comerciales, con el objetivo de empoderarlos y abrirles nuevos caminos”.

Según datos de Aneel, la potencia instalada en generación distribuida en Brasil alcanzará un total de 10,9 millones de kW este año. El número total de unidades generadoras en GD debería llegar a un millón en 2022.