La compañía de data centers e interconexión Equinix y su servicio de CLS (Cable Landing Station) en el área de Los Ángeles se encargarán de dar soporte al sistema de cable submarino Curie de Google. Se trata del primer cable de esta magnitud que llega a Chile durante los últimos 20 años y que, una vez instalado, será una de las autopistas de datos más grandes de Latinoamérica.

El cable se conectará directamente con el data center de Equinix LA4 International Business Exchange TM (IBX), ubicado en El Segundo, California. Google ha elegido a Equinix como su partner de interconexión para este proyecto gracias a la experiencia de la compañía en el desarrollo y la gestión de estaciones de amarre de cables submarinos, como ocurre con los cables MAREA y BRUSA. Se espera que Curie entre en funcionamiento este mismo año.

La configuración de Equinix CLS permite extender la capacidad de backhaul o red de retorno de un sistema de cable submarino directamente a los ecosistemas de las empresas en sus data centers IBX de alta densidad. Esta arquitectura simplifica enormemente el diseño de la red y permite a los operadores de cable acceder fácilmente a un ecosistema denso y rico en redes, nubes y proveedores de servicios IT. Este valor diferencial ha hecho que Equinix fuera el partners seleccionado entre 25 proyectos de cable submarino. Además, la compañía ofrece “acceso a redes de alta capacidad y baja latencia, capaces de conectar a las compañías a data centers de manera transoceánica con gran fiabilidad”, comenta Jim Poole, vicepresidente de Desarrollo de Negocio de la compañía.

El auge de los cables submarinos en Latam

Se estima que en 2021 el nivel del tráfico de datos global alcance los 3.3 zettabytes; cerca de la totalidad de este tráfico pasará por un cable submarino a la hora de que los proveedores de servicios en la nube, los proveedores cloud y de contenidos y las empresas trasladen sus datos de forma global y en tiempo real. “Los cables submarinos son clave para Internet y la conectividad global, ya que el 99% del tráfico intercontinental atraviesa un cable submarino: solo el 1% del tráfico restante depende de sistemas satelitales”, apunta Steve Sasse, Director Estratégico de Equinix para América Latina y El Caribe.

Asimismo, el ancho de banda de interconexión, entendido como la capacidad total provista para intercambiar tráfico de manera privada y directa entre empresas, crezca de manera global diez veces más que el tráfico IP para 2021, según el segundo Índice de Interconexión Global (GXI) de Equinix. La dinámica de los mercados emergentes y la creciente adopción de negocios digitales posicionan a América Latina como la región de mayor crecimiento para el ancho de banda de interconexión, con un 59% anual de crecimiento esperado.