Tras la aceleración digital impulsada por la pandemia, cada vez más empresas buscan en la nube un cambio en la forma tradicional de pensar sobre la gestión de los recursos de TI. Esto es lo que refuerza la última encuesta realizada por IDC Brasil, que muestra que el 39% de los encuestados dice que invertirá en computación en la nube. Para 2022, el 68% de los encuestados desea aumentar la productividad, el 50% reducir los costos, el 41% retener clientes y el 36% introducir nuevos productos / servicios.

Según Maurício Fernandes, presidente de Dedalus, empresa líder en gestión de datos y nube, debido a la necesidad de trabajo remoto y al uso de tecnologías que agilicen los procesos de toma de decisiones, los CIOs de empresas de diferentes sectores pudieron superar cualquier reticencia en mover cargas de trabajo de misión crítica desde sus centros de datos físicos a la nube.

Esto tuvo un impacto importante en el mantenimiento de muchos negocios durante el período de adaptación al nuevo momento del mercado. "Además de los beneficios conocidos, la migración a la nube también nos permite ampliar la capacidad de integrar recursos a través del aprovisionamiento dinámico y bajo demanda, brindando la agilidad que demandan las innovaciones tecnológicas como IoT, Inteligencia Artificial (IA) y Machine Learning.", comenta el ejecutivo.

Estar en la nube también facilita a las empresas la modernización de su entorno tecnológico, en el que el cambio de infraestructura a un modelo de nube de pago por uso proporciona ahorros a corto, medio y largo plazo. Otro beneficio percibido es la reducción de costos con máquinas inactivas, servidores físicos gigantes que demandan altos costos de enfriamiento y mantenimiento, y la posibilidad de elasticidad para un mayor o menor número de servidores disponibles según la demanda de la empresa.

Según el ejecutivo, la decisión de migrar a la nube es un factor estratégico y muestra cierta madurez tecnológica de la empresa. Sin embargo, antes de este paso, es importante evaluar siempre algunos puntos para iniciar el proceso de migración y hacer algunas preguntas a su equipo: "¿Ha llegado el hardware de su empresa al final de su ciclo de vida? Es hora de agregar capacidad a los datos. ¿El contrato del centro está a punto de expirar? Y finalmente, ¿es hora de actualizar a la última versión del software de operaciones críticas para el negocio? ”, dice.

Después de responder estas preguntas, vale la pena considerar la nube como parte de su infraestructura y hablar con una empresa experta para que lo ayude en este proceso. “Incluso si su empresa no se encuentra en ninguno de los momentos mencionados, es posible comenzar a utilizar la nube implementando nuevos proyectos, en lugar de contratar nuevos recursos en el centro de datos actual y así iniciar un proceso de migración gradual”, concluye.