Los arquitectos han construido un piso en un antiguo centro de datos en el centro de París, dándole un distintivo diseño retro de los años setenta.

El edificio de la década de 1970 en las afueras de Le Marais (París XI) se ha convertido en un espacio mixto que incluye oficinas, viviendas, un anfiteatro y una piscina. Encargado de crear un espacio habitable en la planta baja de 250 metros cuadrados sin luz natural, Ubalt Architectes decidió "intensificar" este entorno antinatural y revivir completamente la década de 1970, utilizando plexiglás, carpintería de metal de colores, cortinas iridiscentes y concreto.

"Este loft está ubicado en la planta baja y da a la cubierta del edificio", dice el comunicado de Ubalt, un equipo de dos diseñadores de interiores, Nastasia Potel y Mylène Vasse. “Esa es la gran particularidad de este espacio, que es casi ciego, sin vista al exterior y con poca luz. Con esta observación en mente, la intención del proyecto era intensificar este fenómeno más que enfrentarse a él”.

La única luz que entra en el piso es a través del techo al final de la sala de estar: Ubalt ha colocado una jardinera debajo para aprovechar al máximo la luz.

El plano muestra un pasillo con tres dormitorios, un baño y una sala de estar diseñada para parecerse a un "patio interior", con una extraña escalera decorativa sobre un charco de metal. “Los materiales se hacen eco entre sí para ofrecer una identidad y una puesta en escena a los espacios y en particular a las estancias ciegas del piso”, dice Ubalt.

“Todo el proyecto busca ofrecer un universo onírico y autosuficiente”, comentan los diseñadores. Sin embargo, sí reconocen la posibilidad de que nadie quiera vivir allí: "La intensificación del proyecto también implica la posibilidad de que este espacio se transforme para cambiar su destino y convertirse en una sala de exposiciones o un lugar de trabajo gracias a su doble cocina, lavadero, bauleras, sala de proyecciones / gimnasio y dormitorios que se pueden transformar fácilmente en salas de reuniones".

DCD se puso en contacto con Ubalt para obtener más detalles, pero hasta ahora no ha podido averiguar más sobre el centro de datos que anteriormente ocupaba el espacio. "Desafortunadamente, cuando visitamos el lugar, ya se había limpiado todo hacía mucho tiempo", dijo Nastasia Potel. "Sólo quedaban las paredes".

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