Las filas de servidores que conforman un centro de datos generan enormes cantidades de calor. Si el equipo se calienta demasiado, se apaga para protegerse y ocasionar fallas en el centro de datos, una pesadilla para todos los involucrados.

Las tendencias actuales de los centros de datos muestran un aumento significativo en la computación de alto rendimiento para soportar inteligencia artificial, aprendizaje automático y aplicaciones similares. Al mismo tiempo, el diseño avanzado del procesador aumenta las densidades de los chips, como ocurre con los procesadores GPU. En casos extremos, estamos viendo racks de 30-60kW que albergan servidores de alto rendimiento y alto rendimiento.

Estas demandas de Big Data, Internet of Things (IoT) y Edge Computing están incrementando la densidad térmica del centro de datos, lo que aumenta el riesgo de interrupciones si no se gestiona con cuidado.

Esta situación ha creado la necesidad de buscar nuevos enfoques para la gestión térmica, incluidos movimientos radicales como la refrigeración por inmersión, lo que significa que el procesador u otros componentes están sumergidos parcial o totalmente en un líquido para disipar el calor, se está convirtiendo en una solución viable.

Antes de adoptar tales soluciones de refrigeración, los operadores de centros de datos deben examinar su infraestructura de refrigeración existente y determinar las oportunidades de ahorro de energía. Al observar el consumo de energía en tiempo real y al recopilar patrones históricos de consumo de energía, los expertos pueden proporcionar la mejor evaluación para reducir el gasto de energía. El objetivo general es poder optimizar la capacidad de enfriamiento y administrar el flujo de aire dentro del centro de datos.

Estos son los cinco pasos para lograr un centro de datos altamente eficiente:

Primer paso: anticiparse a la optimización

Cada área de la instalación del centro de datos debe ser evaluada por un profesional del centro de datos. Las áreas clave que deben medirse incluyen iluminación, refrigeración, unidades de distribución de energía, otros servidores, procesadores, fuente de alimentación del servidor, UPS, almacenamiento, equipos de comunicación y equipos de conmutación y transformadores.

Segundo paso: medir los datos

La información recopilada de la evaluación en el primer paso será analizada por el profesional del centro de datos, incluido el porcentaje de la capacidad de TI, la medición de energía, la redundancia de la unidad de aire acondicionado de precisión (PACU) y la configuración del pasillo frío / caliente.

Este análisis dará una revisión profesional del rendimiento del centro de datos.

Tercer paso: analizar los hechos

En este punto estén varios puntos clave que pueden abordarse para reducir los costos de energía:

  • Medición y verificación: la medición / monitorización proporciona una línea de base PUE (Efectividad mecánica del uso de la energía) del "antes y después" del proceso de optimización; También proporciona consumo en tiempo real e histórico de kWH.
  • Gestión del flujo de aire (debajo del piso, dentro del bastidor, configuración de pasillo frío y caliente, retorno de aire)
  • Optimización de la unidad de aire acondicionado de la sala de computación: puesta en servicio de las unidades CRAC, control de la temperatura del aire y sensores de recalibración
  • Identificación de puntos calientes: Utilizando escaneo térmico para identificar y eliminar la entrada de aire caliente

Cuarto paso: Mejorar el diseño del centro de datos

Algunas acciones básicas que se deben tomar, que contribuirán al ahorro de energía y la eficiencia del centro de datos son:

  • Identificar diferentes puntos de estrés.
  • Considerar la gestión de flujo de aire diferente según sea necesario (es decir, contención, controles inteligentes y economización)
  • Regular la temperatura (disposición de la rejilla de pasillo caliente / pasillo frío y sellando las brechas de refrigeración en el piso del centro de datos)

Quinto paso: disfrutar de los resultados

El proceso de optimización detallado anteriormente garantizará que los resultados sean los previstos según el presupuesto, los requisitos y las expectativas.

Múltiples puntos de referencia han demostrado sistemáticamente que las acciones detalladas anteriormente han producido ahorros de energía de entre el 30 y el 50 por ciento en los costes de refrigeración y han reducido los costes generales de energía de las instalaciones entre 10 y el 25 por ciento.


Chris Mandahl es el vicepresidente de servicios y gestión de proyectos en Vertiv Asia