Este mes de marzo está dedicado a ellas, a las mujeres que inspiran con su trabajo, a aquellas que son un referente para muchas jóvenes y las animan a apostar por enfocar sus trayectorias hacia el ámbito tecnológico.

En DCD, esta semana hablamos con Michell Colindres, ingeniera coordinadora de la transmisión en Operador del Sistema (ODS), que se ha convertido en la primera mujer desempeñando el cargo de ingeniera de la transmisión operando el sistema eléctrico Nacional de Honduras. Hace seis meses que comenzó este reto para ella y afirma que cada día el sistema eléctrico tiene una lección nueva que enseñarle.

¿Cuáles son los focos de trabajo de Operador del Sistema (ODS) para este año 2022?

Ser reconocidos dentro del sector eléctrico nacional e internacional como una empresa de manejo eficiente de los recursos y regulaciones energéticas con los contamos, y que busca alcanzar la excelencia, para contribuir con el desarrollo integral del país, dando un servicio con los más altos estándares de la industria eléctrica.

¿Cuáles son tus objetivos y responsabilidades dentro de esta posición como Ingeniera coordinadora de la transmisión?

Como coordinadora de la trasmisión mis principales responsabilidades son las siguientes:

Coordinar con personal operativo en campo y ejecutar las maniobras eléctricas correspondientes desde el sistema SCADA para el correcto, seguro y pronto restablecimiento del servicio.

Analizar en tiempo real los diferentes parámetros eléctricos del sistema para que estos cumplan con los criterios de calidad, seguridad y desempeño mínimo (CCSDM) que aseguren la continuidad del servicio.

Coordinar las acciones de la red eléctrica de transmisión y distribución del país, en cuanto a mantenimientos, fallas o indisponibilidades que se presenten en la red.

Te has convertido en la primera mujer desempeñando el cargo de Ingeniera de la transmisión, operando el sistema eléctrico Nacional de Honduras, ¿qué supone este hecho para ti y qué mensaje mandarías a otras mujeres para inspirarlas con tu ejemplo?

Me enorgullece marcar un hito en la historia del Centro Nacional de Despacho, es un reto muy grande ya que además de las grandes responsabilidades que debo de cumplir. Así mismo me debo de someter a turnos donde sufro cambios de horarios drásticos como por ejemplo; un día puedo salir de un turno de madrugada para luego seguir el siguiente día, con un turno de día, es algo que mis compañeros hombres ya lo hacen y realmente es complejo, por lo cual merece mucho sacrificio, aquí trabajamos todos los días del año y las veinticuatro horas del día; sigo aprendiendo como regular mis horas de sueño y mis tiempos de comida.

Mi mensaje a todas las mujeres es que no importa el rubro en donde nos estemos desempeñando, lo más importante es conocer nuestras capacidades, habilidades y conocimientos. Cuando estamos seguras de todo lo anterior, podemos entonces transmitirlo a los demás, y sobre todo demostrarlo. Por favor, no duden de lo que son capaces, no permitan que los demás lo hagan y, sobre todo, marquen la diferencia, rompamos paradigmas, demostremos que cualquier trabajo, profesión u oficio puede ser desempeñado sin importar si eres hombre o mujer.

¿Cómo consideras que está avanzando la introducción de las mujeres al mundo de las tecnologías en Honduras?

Puedo decirte con mucha seguridad que las oportunidades para las mujeres están creciendo, vamos por buen camino, eso me llena de satisfacción.

¿Cuáles son los principales retos que crees que enfrentan las mujeres a la hora de acceder a empleos dentro del ámbito tecnológico?

El tradicionalismo, creo que salir de la zona de confort es un riesgo que las empresas no quieren asumir, la costumbre hace que sigan empleos donde solo los hombres se han desempeñado.

¿Qué se podría hacer para que el porcentaje de mujeres dentro de la industria tecnológica sea más elevado?

Como mujeres nos recae esa responsabilidad, para que las oportunidades sigan creciendo a nuestro favor, nada mejor que marquemos la diferencia y dejemos una buena referencia para nuestras futuras generaciones de mujeres y con esto me refiero; evitemos dar excusas, victimizarnos, ser débiles. Porque las mujeres somos fuertes, podemos tomar buenas decisiones, tenemos carácter, y somos capaces de lo que nosotras mismas nos propongamos.